La niña,trajo la noche
en el hueco de sus manos
la luna estaba en los pliegues de su
cuerpecito blanco.
y Era polvillo de estrellas
en los cabellos castaños
afuera quedo el silencio
en la nada arrebujado
el viento cantaba triste
en los pinos solitarios
¡la niña trajo la vida,en el hueco
de sus brazos!
El miedo volcó en las sombras
su sabia de gusto amargo.
Y los dioses de la envidia
por el portal entreabierto suavemente
penetraron.
La niña trajo el destino
escondidito en sus manos
la noche enlazo su cuerpo
la luna sello sus labios
y los artistas de plata
la blanca sien desgarraron.
La niña trajo la muerte
acunadita en sus brazos.
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